jueves, 29 de marzo de 2012

DISECCION Y AA TORACICA

 La distinta topología origina las tradicionales clasificaciones de las disecciones
aórticas conocidas como de De Bakey y Stanford.
Clasificación de De Bakey:
• Tipo I: Disección que comienza en la aorta ascendente cerca de la válvula aórtica y se extiende hasta por lo menos el cayado.
• Tipo II: Disección limitada a la aorta ascendente.
• Tipo III A: Disección que comienza distal a la arteria subclavia izquierda y queda localizada en ese sector.
• Tipo III B: Disección que comienza distal a la arteria subclavia izquierda y se extiende distalmente a la aorta abdominal.

Clasificación de Stanford:
• Tipo A: Todas las disecciones que comprometen la aorta ascendente independientemente de su origen.
• Tipo B: Todas las disecciones que no comprometen la aorta ascendente.


Clasificación propuesta por la ESC:
• Clase 1: Disección aórtica clásica con flap intimal entre la luz verdadera y falsa.
• Clase 2: Disrupción de la capa media con formación de hematoma y/o hemorragia intramural.
• Clase 3: Disección limitada o discreta, sin hematoma y con una protuberancia a nivel de la rotura intimal.
• Clase 4: Rotura de palca con ulceración penetrante sobre territorio aterosclerótico, habitualmente con hematoma subadventicial.
• Clase 5: Disección aórtica iatrogénica o traumática.

Diámetros normales y patológicos de la aorta según recomendaciones de la ESC
Dimensiones normales de la aorta
                  Dimensión normal             Método de medición


                           1.0 a 1.6 cm/m-2        ecodoppler transesofágico
aorta
descendente     < 2.8 cm (1.7 a 2.8 cm)  tomografía  computada 

espesor de la pared aórtica   < 4 mm ecodoppler transesofágico
                                          < 4 mm tomografía computada   
                                               < 3 mm angiografía 


TRATAMIENTO MÉDICO INICIAL
El tratamiento médico inicial se orienta a lograr la estabilización hemodinámica, la analgesia y el control de la presión arterial. Tratamiento de la disección aórtica y hematoma intramural



TRATAMIENTO DE LA DISECCIÓN AGUDA TIPO A
La disección aguda tipo A constituye una emergencia quirúrgica, ya que el
tratamiento médico no logra modificar la elevada mortalidad comentada. El
tratamiento consiste en el reemplazo de la aorta ascendente y/o cayado, y en
algunas ocasiones reinserción de coronarias, reemplazo o resuspensión valvular,
paro circulatorio e hipotermia profunda.

TRATAMIENTO DE LA DISECCIÓN TIPO B Y HEMATOMAS
INTRAMURALES
En los casos de disecciones agudas tipo B no complicadas está indicado el
tratamiento médico, que incluye el manejo del dolor y control de la presión
arterial. El tratamiento quirúrgico se limita a los casos con disección retrógrada a
aorta ascendente o complicaciones como expansión aneurismática, hematoma
periaórtico o isquemia visceral. Se recomienda la cirugía en hematomas
intramurales agudos de la aorta ascendente. El papel exacto del tratamiento de
la disección tipo B con endoprótesis no ha sido determinado aún.
Fenestración percutánea:
En las situaciones de isquemia visceral y alto riesgo quirúrgico, puede indicarse
la fenestración percutánea con balón y la eventual colocación de una
endoprótesis (stent-graft).
TÓPICOS ESPECIALES
En pacientes mayores de 80 años se debe evaluar la relación riesgo beneficio de
la cirugía, dada su elevada mortalidad. Ante la dilatación de la aorta ascendente,
la indicación de cirugía según su diámetro varía de acuerdo a la presencia de
síndrome de Marfán y la edad.




















ANEURISMA AORTA TORÁCICA DESCENDENTE
OBJETIVOS DEL TRATAMIENTO
El objetivo fundamental del tratamiento es prevenir la ruptura del aneurisma, y
eventualmente las complicaciones originadas por el crecimiento y compresión de
los órganos vecinos.
TRATAMIENTO QUIRÚRGICO
La cirugía del aneurisma de aorta torácico está indicada en aneurismas de aorta
ascendente mayores a 5,5 cm en ausencia de Marfán o mayores a 5 cm en
presencia de Marfán. En el caso de aneurismas de aorta descendente se debe
indicar la cirugía o eventual endoprótesis ante la presencia de complicaciones o
síntomas por compresión de órganos vecinos. En un ECR y un meta-análisis de 3
ECR el drenaje de líquido cerebroespinal durante la cirugía y en el postoperatorio
redujo el riesgo de paraplejía. El aneurisma tóraco-abdominal roto presenta
elevada mortalidad y requiere corrección quirúrgica de urgencia

http://www.echobasics.de/adiss-cas.html